29 de abril de 2011

Esputando

Simplezas de lo cotidiano

Errantes humanos con sino desviado

En bosques de metal oxidados

Almas sin aurea filosofando.



Bisbiseando cotilleos del que será

Entre dientes, bocados de realidad.

Arremangaos los pantalones sin más

Para poder saltar charcos de falsedad.



Copias baratas de hombres sin piedad,

De mujeres santas azotando con látex

Lubricadas hasta las pestañas remarcadas

Besando promontorios de heces singulares.



Desgarras rabiosamente mi piel ardiente

Reventando ampollas con tú gesto,

Resbalando su líquido por mi cuerpo,

Pestilente como mí alma, como mí aliento.



Mudada la piel, me arrastro jadeando,

Zigzagueando por dunas del desierto

En busca de mi próxima víctima

A la que hincar el diente y mí veneno.



Vendas tus ojos cuando me miras,

Tú, que me humillas, sociedad insana

Que me retuerces con odio el cuello,

Chasquido de vertebras, sonido bronco.



Conciudadanos egoístas del mundo,

Que sólo os miráis el ombligo…

Con el poder entre las piernas,

La cabeza de ecos furibundos.



Ladrando con esputos mentales

Meneando la cola a tu ritmo,

Nos movemos tras de ti

Sociedad inmunda…



Trago cuchillas de afeitar

Voy abriendo camino carnal

Hacia las entrañas del mal

Que son mi avaricia y tempestad.



Nos bajamos los pantalones

Poetas que al limpiarnos el culo,

Enseñamos orgullosos al mundo

Nuestra gran obra maestra.

1 comentario:

Unknown dijo...

Ya te dije en alguna ocasión lo que me gustó y sorprendió.
Es como otro Toni más apegado a la realidad y crítico duro de la misma.
Abrazo nen.